“Qué importante es entender el mundo del otro”… Educar es aprender de nuevo a leer, leer miradas y entender palabras. A comenzar todos los días caminos nuevos.
Pedir permiso para ser compañeros de viaje, a veces sin tener a mano una brújula que ayude a encontrar el camino más fácil y certero, pero dispuestos a quedarnos ahí para ayudar a poner nombre a los sentimientos, llenando de preguntas sus mochilas, dibujando caminos en el suelo.
A veces toca detenerse y esperar. Dejar que sean ellos los que se giren en el trayecto y vean que puede ser posible dedicando tiempo y esfuerzo. Que no es tan importante la distancia, sino la llegada al puerto.
Otras veces toca sacar bandera blanca en la batalla, dar pasos cortos e incluso lentos y darnos la oportunidad de poder empezar de nuevo. Y volver al origen del camino, creyendo, amando, formando parte del sueño…
Es cierto que puede haber derrota, que se hacen tablas como en el juego, pero queda el aprendizaje para que un día ellos solos puedan retomar el sendero. Que en una vida hay muchas vidas y siempre se puede empezar de cero.
Y qué privilegio es ser compañero… y sentir que también nosotros les necesitamos a ellos.
Educamos… pero siendo ellos nuestros maestros.
Elena Fresneda (Educadora de Las Naves-Alcalá)