La crisis económica hace que nos encontremos constantemente ante preguntas sobre el futuro, es frecuente vernos envueltos en conversaciones referentes al desarrollo del país y su evolución en el futuro. Sin embargo en esa construcción ideal del futuro, se nos olvida, muchas veces realizar un análisis real del presente, incluso del pasado.

Ante esa pregunta, nosotros nos planteamos ¿qué es necesario para un desarrollo sostenible y vigoroso de nuestra sociedad? La respuesta siempre acaba por apuntar a un motor que sea lo suficientemente potente y sobre el que sea posible interferir para un desarrollo integral, la respuesta que encontramos siempre es, la educación.
Pero no es la única, existen otras fuerzas de las que los países precisan para lograr el pleno desarrollo, en los países más desarrollados, los inmigrantes suponen una de las fuerzas más emprendedoras de la economía.

Ante ese mapa, es necesario responder a algunas preguntas de futuro, desde el análisis del ahora, y de las causas que nos traen aquí. Comprender los itinerarios formativos de los hijos de inmigrantes es parte fundamental, conocer sus historias, las causas que les han traído hasta aquí y el capital social que suponen por su experiencia de esfuerzo, emprendimiento y sacrificio. Conocer por qué un tercio de los jóvenes no llegan a terminar la enseñanza secundaria y todas las variables que influyen en los procesos de abandono y fracaso escolar es necesario para saber hacia dónde caminar.

A través del estudio “Sobre Hombros de Gigantes” de la Federación Pinardi y la U.P.de Comillas llegamos a dos ejes fundamentales en el conocimiento de los factores que influyen en la desvinculación escolar en los hijos de inmigrantes: la familia y la educación. En nuestro trabajo diario, descubrimos constantemente la experiencia de las personas que en busca de una movilidad social que les proporcione bienestar a ellos y sus familias deciden dejar su país de origen. Llegan a nuestro país y después sus hijos, un salto movido por la esperanza, no por la necesidad, que afecta a la integración de los menores en diversos aspectos. Por un lado la integración en el proyecto migratorio familiar del que apenas tienen conocimiento, supone la integración en la nueva escuela. El aprendizaje del idioma es fundamental para lograr el éxito escolar, el trabajo de las aulas de enlace y los centros de apoyo educativo se configuran básicos aquí. El impacto en el nuevo medio también supone a veces confrontarse con un sistema educativo que ejerce un seguimiento y comunicación con las familias en ocasiones deficiente. Esto lleva a que estos menores se encuentren desorientados y, en la mayoría de las veces, a que haya un abandono escolar.

Sin embargo, existe entre los padres de estos chicos una protección por la trayectoria formativa de sus hijos, una valoración del sistema educativo en nuestro país que tenemos que ser capaces de convertir en nuestra aliada. Sabiendo que la mayor aliada para la reorientación formativa o profesional de estos jóvenes es la propia familia, la experiencia de superación de sus propios padres, el mantenimiento de la esperanza aún cuando la situación laboral es precaria o cuando la migración ha supuesto una disminución del estatus social. . Y es ahí donde desde la Federación Pinardi, y las entidades sociales debemos poner el acento de nuestras acciones, la comunicación de la esperanza y el ejercicio de la esperanza debe ser un ejercicio fundamental en nuestro trabajo con los jóvenes inmigrantes.

Es necesario analizar el nuevo escenario educativo y familiar; y continuar ofreciendo respuestas que permitan seguir adecuando los itinerarios formativos para los hijos de inmigrantes. Enfatizando la necesidad de reforzar el acompañamiento y oferta de recursos para sus familias, que nos permita apoyarnos sobre sus hombros, y así hombro a hombro, elevar el espíritu y el desarrollo de nuestra sociedad.